Elena Franco
El llamado de no salir de nuestras casas, implica más que sólo prevenir un contagio de Covid-19, incluso a algunas personas les resulta una medida muy sencilla; pero mucho se ha visto que dentro de esta pandemia, uno de los principales sectores que se verá afectado es el económico.
Hace unas semanas, empresas y comercios iniciaron a cerrar sus puertas al público, y ahora con la declaración de emergencia sanitaria y la suspensión de actividades no esenciales hasta el 30 de abril, muchas familias están económicamente hablando, en aprietos.
Esta situación ocasiona una sensación de pérdida en las personas, debido a la falta de ingresos o de trabajo, sobre todo cuando existieron despidos por parte de las empresas.
En este sentido la Doctora en Psiquiatría Martha Palencia comenta que no sólo el trabajador está viviendo una época de crisis, también el empresario, ya que el gobierno federal le exige conservar empleos, pero no le ofrece una opción de incentivo fiscal, como puede ser la disminución de cobro del recibo de luz, o que el gasto del seguro social del trabajador recaiga en la federación.
Debido a la situación actual también trabajadores informales se ven obligado a cerrar su fuente de trabajo; un ejemplo son aquellas personas que trabajaban en los puestos del parque Guadiana, se les dijo “con permiso, nos volvemos a ver, si es que nos volvemos a ver, después de esta contingencia” comentó la doctora.
Por una parte, está el bienestar, y por otra, la pérdida de la capacidad de adquisición, en estos momentos es vital poder hacer una despensa, comprar un medicamento que pueda hacer falta, el mexicano vive al día, y todo esto que está viviendo ocasiona estrés, ansiedad, depresión, incluso el suicidio. A todo lo anterior le sumamos a que el encierro enferma.
“No están acostumbrados a permanecer en casa, es una manifestación de la incomodidad que nos genera el entorno que estamos viviendo. ¿Qué me representa quedarme atrapado en casa?, estar atrapado en deudas, en pobreza, en conflictos emocionales, es lo genera inquietud”, declaró la Directora del Instituto de Tanatología María Antonieta Pulido.
Por no saber cómo lidiar con el estrés, esta situación se ve reflejada en la violencia familiar y las emociones, porque no se encuentra una salida; por un lado, las deudas, y por otro, no se cuenta con los recursos económicos suficientes para enfrentarlas.
María Antonieta Pulido coincide que el trabajador informal, es más vulnerable, generalmente están sacando los recursos económicos para sobrevivir y para sostener su pequeño negocio al día, ni si quiera para tener una calidad de vida.
Un empresario está preocupado por la afectación económica que esta crisis del Covid-19 traerá al sector productivo, en este aspecto se sienten abrumados ante la incertidumbre, además de también sentirse invadidos por el estrés, comentó la titular Emily García Montiel titular de la Asociación Mexicana de Mujeres Empresarias (AMMJE).
Como empresarios, lo que siempre motiva a salir adelante son las familias, en el caso de AMMJE son el sustento de 1300 núcleos sociales, que buscan innovar sus propios negocios, a través de la capacitación y la realización de talleres.
Para el trabajador promedio que no ve un panorama positivo, recomienda María Antonieta Pulido una serie de acciones y actividades para liberar ese estrés para prevenir que detone en un posible suicidio durante esta contingencia, desde actividades en el hogar hasta formas de desahogarse.
Para finalizar Martha Palencia comentó que de acuerdo con la psiquiatría se tiene que buscar una forma de lidiar las emociones, ya que si bien, la época estacional genera brotes psicóticos y cuadros de depresión que surgen de un momento a otro, si le sumamos los factores detonantes como una pérdida de empleo, el susto y el miedo ocasionado por el Covid-19, irán en aumento casos de depresión y suicidio.