El Día de la Madre y el Arte
Por: L.C.T.C. David Muñoz Carranza
Después de la celebración del día de la niñez, no podíamos pasar por alto una fecha con la misma importancia, nos estamos refiriendo al emblemático Día de las Madres, y en esta ocasión hablaremos de las madres de algunos artistas que en alguna ocasión hicieron el papel de sus modelos.
Nuestras madres, seres excepcionales que dan todo por nosotros y que son ejemplares, sabias, tiernas, cariñosas, etc., además de un sinnúmero de características que podrían definir a las madres en general; el día de hoy hablaremos del ejercicio de posar para sus hijos artistas, pintores, creadores, es el de convertirse en el modelo a replicar.
A lo largo de la historia del arte, la gran mayoría –no todos- de los artistas, han estado en busca de a quién pintar, qué retrato replicar, a quién plasmar en sus cuadros, en sus obras, si bien, algunos de los artistas, han llegado a trabajar por encargo; esto quiere decir que por su perfección plástica, les llegan a pedir, encargar o comisionar ciertos tipos de obras, como es tan sabido, por ejemplo, cuando los antiguos reyes les encargaban pintarlos a ellos mismos, a sus familias, o también se les solicitaba a los artistas plasmar a la nobleza, gente de la iglesia, o señores con gran poderío; en fin, los encargos pueden variar por quien los comisiona, pero de lo que se trata aquí es de explicar, que en la mayoría de esos casos, el artista ya tenía claro a quién iba a pintar; a replicar en sus obras, y en este mismo tema de quien sería la persona que iban a pintar, podemos decir que no existía un lazo afectivo tan fuerte como lo es de pintar a sus propias madres.
Existen pintores que a lo largo de su trayectoria o carrera artística tuvieron ese acto de genuflexión ante el inmenso amor que prodigaban a sus madres, a sus creadoras, a las autoras de sus días. Existen artistas que llegaron a replicar a su amada progenitora de manera sublime, por el fuerte lazo de unión que hay entre una madre y su hijo.
A ciencia cierta no sabemos bien, quien, en estos casos era la persona que pedía que la pintaran, si las propias madres de los artistas les hayan solicitado que las plasmaran en sus obras al ver que sus hijos eran unos genios de la pintura y por esa razón querer ser parte del legado que seguiría para la posteridad de la historia del arte; o tal vez por otro lado, que los mismos hijos artistas, como mencionamos anteriormente, quisieran rendirles un pequeño, pero muy simbólico homenaje a sus progenitoras, que los trajeron al mundo, eso, sólo ellos sabían; pero lo que es irrefutable, es que ahí están las obras que podemos admirar, contemplar y maravillarnos de esos homenajes tan merecidos a nuestras propias madres, esas obras de arte dan cuenta del pequeño gesto de agradecimiento, de todo lo que han hecho por nosotros; y qué mejor, si ellas en vida puedan llegar a ver con su tierna mirada esas obras en la que ellas son las protagonistas de estos homenajes.
Algunos de estos artistas fueron Rembrandt, Paúl Cèzzane, James Whistler, Vincent Van Gogh, Picasso, Marc Chagall, Andy Warhol, entre muchos otros pintores; en lo personal, de igual manera, su servidor, también plasmé a mi amada madre, y la reinterpreté en una fotografía estilo Pop Art, a mi progenitora.
Excelente artículo !