El brazo armado de Hamás, las Brigadas al Qasam, desmintió las afirmaciones israelíes sobre la retención de rehenes en hospitales de Gaza.
Según su declaración, trasladaron a personas enfermas a centros médicos para recibir tratamiento, alegando la muerte de un cautivo debido a los ataques de pánico ocasionados por los bombardeos cercanos a su lugar de detención.
Por otro lado, el brazo político del grupo acusó a Israel de perpetrar un genocidio en el hospital Al Shifa, donde las tropas israelíes han llevado a cabo operaciones tras quedarse sin energía durante el asedio. Este anuncio de Hamás sigue al descubrimiento por parte de Israel de dos rehenes fallecidos cerca de Al Shifa, una soldado de 19 años y una mujer de 65, secuestradas el 7 de octubre.